Siempre me pareció que las celebraciones en torno a la muerte del rey Don Pedro, parecían mostrar una imagen victimista del personaje, fruto de una cruel injusticia de su hermano “bastardo” en alianza con otro siniestro “mercenario”:  Beltrán Duguesclin...

En cierta ocasión pude ofrecer en esta web, mis comentarios sobre el Señor Beltrán que consideraba con fidelidad a la historia, un renombrado militar galo.

El calificativo de mercenario hay que usarlo con objetividad, pues sabemos que otro personaje – este español – con resonancias también templarias es Roger de Flor y sus celebres “almogávares” cuyas gestas militares sobresalieron en todo el Meditarreneo, y su carácter mercenario no le restan digna ejemplaridad en la historia.

El reciente estudio que he realizado para Torre de Juan Abad “ Almonecid-Huellas del Temple...” me ha servido para profundizar en los movimientos de ciertas órdenes “domesticas nacionales- que lejos del carácter “de caballeros cruzados” estuvieron mas dispuestas al reparto del botín procedente de la extinguida injustamente Orden del Temple, como reconoció el Vaticano en 2001.

El Rey Don Pedro no fue ajeno al “reparto” y también está acreditado el envío de emisarios reales al Papa para pedir “su parte”.

Beltrán Duguesclin (1314-1380),  intervino en la guerra que enfrentó en Castilla a Pedro I "el Cruel" y a su hermano Enrique de Trastamara, tratando de “mover ficha” alineado con la política francesa en la Guerra de los Cien Años, ya que Pedro I, estaba mas sintonizado con el Rey de Portugal y los británicos.

Es muy posible que Dugesclin habría sido Gran Maestre del Temple refundado en 1357, y es idéntica  la organización militar y capas de sus “Compañias Blancas” del todo similares a la templaria .

La muerte del Rey Don Pedro I dejaba extinguida la dinastia de Fernando IV “el desplazado” que al igual que Felipe IV “el Hermoso”, persiguió y expolió al Temple en su Reino de Castilla.

Fernando IV de Castilla, al igual que Felipe IV de Francia fue maldecido por dos antiguos caballeros templarios: los hermanos Carvajal, y anunciada su muerte antes de que estos fueran ejecutados en Martos el 8 de agosto de 1312.

Pero hay otra significativa “aparición” de las Compañias Blancas de Duguiesclin:  para proteger al Papa cismático español Pedro de Luna, recluido en el castillo de Peñiscola nos hace pensar en que la Orden Templaria dirigida por el francés pudo muy bien intentar llevar a cabo el ideal universal de los templarios....

Los temas medievales de nuestra historia se han visto – sin duda – realzados por la recreación histórica de Montiel, pero no debemos olvidar las injustas particiones de territorios promovidas por la Orden de Santiago, que en el caso de Torre de Juan Abad y en otros municipios del Campo de Montiel, redujo considerablemente su territorio.